tener un perro

Vivo en una ciudad de pocas plazas, pocas calles con árboles y escaso silencio. Una ciudad ruidosa, de aire espeso y ahumado, en la que pocos tienen tiempo y el tiempo sólo se mide por el reloj. Alguna vez esta fue una ciudad bella; en el tiempo en el que aún la amábamos. Ahora de todo eso queda poco, o casi nada; cada día hay menos parques y jardines, y más estacionamientos; menos casas viejas con viejos patios secretos, y más torres de vidrio y cemento; menos árboles, y más carteles y anuncios; más calles y semáforos; y menos veredas grandes, con bancos en las esquinas para los viejos y los paseantes. Pero yo tengo un perro. Y es por eso, tal vez, que cada tarde camino la ciudad a su paso, sin tiempo. Dejo atrás la prisa y me adentro en el espacio de los perros. Voy por las calles como un perro; miro el mundo con ojos de perro; llego hasta una plaza con perros; me acerco a otros que, como yo, vienen con sus perros; y hablamos de perros. Y el tiempo pasa, o no pasa -es igual- y la ciudad moderna y gris, la ruidosa ciudad de humo, se queda por un momento callada. Porque sólo un perro hace que una vereda sea algo más que un lugar de paso, y una esquina algo mejor que sólo el encuentro de dos calles. Y que esa plaza se vuelva, cada tarde, un inmenso jardín.

2.9.07

Primera encuesta aperrada

Uno de los grandes debates de los últimos años, en materia de animales domésticos, ha sido el que gira entorno a las razas potencialmente agresivas y la tenencia responsable de mascotas. Es por eso que los invitamos a responder a la primera encuesta de nuestro blog (ver columna lateral) y, de paso, a dejar aquí sus comentarios. ¿Qué opinan sobre el tema?


4 comentarios:

Lorena dijo...

Hola aperrados,
Según consta en mi brazo(una linda cicatriz con toda una muestra dental), las razas tienden a presentar un comportamiento que no necesariamente es aquel que el dueño ha intentado inclucarle. Hay perros exquicitos que se portan tranquilos y adorables con sus dueños y cercanos, pero que sacan una personalidad inscrita en el ADN cuando la situación sale de su control. No creo que haya que prohibirlos o sacrificarlos, sólo saber que tienen límites y que la sociabilización de ellos debe hacerse con gran cuidado.
Un abrazo a todos,
Lorena

Nachita dijo...

Hola!!!
Personalemente encuentro que los perros de razas agresivas si pueden ser así, pero también pueden ser tiernos, pero por otro lado va la razón por la cuál uno quiere esa raza, es decir, si yo quiero un perro que me cuide la casa y que sea agresivo, elijo una de esas razas, pero es mi deber como dueño del perro de que este no salga suelto y siempre que una persona adulta sea y se haga responsable de lo que pueda hacer, pero hoy en día lamentablemente están de moda estas razas y es ahí cuando las personas se compran estos perros sin saber la manera correcta de sociabilizarlo y de entrenarlo para lo que uno quiere. Al igual que la Lore, no creo que haya que prohibirlos, pero si encuentro que los dueños de los perros debieran tener algo así como un seguro o como firmar en alguna parte de que ellos se hacen responsable de cualquier daño que puedan provocar.
Besos
Nacha

Anónimo dijo...

Hola !
Todos los que tenemos perros, al menos todos los que conozco, tratan a sus mascotas como si fueran hijos, con un cariño impresionante. Pero no debemos olvidar (aunque muchas veces lo hacemos)que ellos son animales, y no personas, que su grado de entendimiento no es igual al nuestro y que el instinto les aflora en ciertas situaciones de acuerdo a su raza... con esto voy a que hay gente que tiene perros de raza peligrosa y los suelta diendo mi perro no hace nada... sí, es muy probable que su perro sea super bueno y amoroso, pero no debemos confiarnos a que en algun minuto, por su instinto que muchas veces no podemos preveer pueda atacar a un niño, un perro o nosotros mismos.
El perro es perro y nosotros debemos ser los RESPONSABLES de su crianza y cuidado hacia los demas y nosotros mismos.
Cariños
Laurita.

Anónimo dijo...

Como querendona de perros, gatos y animales en general debo decir que muchos de ellos tienen un caracter bastante dominante y agresivo y que es ahí donde debe intervenir el amo. Y es justamente a ese rol al que me quiero referir. Es a la responsabilidad de tener un animal. Se mantenerlo bien alimentado, de no exponerlo a peligros innecesarios, de mantenerlo saludable y brindarle cariño. Pero también asumir y responder si su mascota hace daño ya sea a una persona, a otro animal o incluso a un bien de otra persona.
He sido testigo cuando gente ha sido afectada fisicamente por peleas entre perros y los amos ni siquiera han sido capaces de pedir disculpas o hacer un seguimiento a la persona herida. Menos si se trata de otro animal.
Por ello los invito a reflexionar y quizás ser la voz de la conciencia si somos testigos de un insidente así y el responsable no se hace cargo.